Aprender un nuevo idioma puede ser emocionante, pero para muchas personas, también puede ser una fuente de ansiedad. Ya sea por miedo a cometer errores, por sentir que no se progresa con suficiente rapidez o por la presión de hablar en público, la ansiedad puede ser un obstáculo significativo.
Sin embargo, es posible superar este reto con estrategias simples y efectivas. Aquí te compartimos algunos consejos para disfrutar del proceso de aprendizaje:
- Cambia tu mentalidad: Los errores son parte del aprendizaje: Muchas personas evitan practicar inglés por miedo a equivocarse, pero los errores son esenciales para mejorar. Cada vez que te equivocas, tienes la oportunidad de aprender algo nuevo.
- Practica en un ambiente seguro: Sentirse juzgado o expuesto puede aumentar la ansiedad. Es fundamental encontrar un lugar donde puedas practicar sin presión. Te recomendamos unirte a grupos pequeños de práctica, buscar un compañero que esté dispuesto a practicar con vos o bien, usar aplicaciones de aprendizaje o espacios virtuales que te ayuden a avanzar en tu proceso.
- Aprende a relajarte antes de practicar: La ansiedad puede bloquear tus pensamientos y dificultar tu capacidad para recordar vocabulario o estructurar frases. Podés hacer ejercicios de respiración, meditación o escuchar música que te tranquilice antes de tus clases o prácticas.
- Divide el aprendizaje en metas pequeñas y alcanzables: Intentar abarcar demasiado en poco tiempo puede ser abrumador y generar frustración. Para esto:
• Define objetivos específicos, como aprender cinco nuevas palabras al día o practicar una estructura gramatical a la semana.
• Estudia en sesiones cortas de 10-15 minutos.
• Celebra tus logros, por pequeños que parezcan, para mantenerte motivado.
- Encuentra recursos que disfrutes: Incorporar actividades divertidas puede hacer que el proceso sea más relajante y agradable. Un ejemplo de ello puede ser ver películas o series en inglés con subtítulos, escuchar música o pódcast en inglés y repetir lo que escucha, leer libros, artículos o cómics de temas de tu interés.
- Enfrenta tus miedos de manera gradual: Es importante exponerse al idioma de manera controlada y progresiva, comenzando por hablar inglés con personas de confianza antes de intentarlo con desconocidos.
- Aprende a gestionar tus expectativas: La ansiedad puede surgir cuando te comparas con otras personas o esperas resultados inmediatos. Concéntrate en tu progreso personal y evita compararte con otros.
- Conecta con la cultura del idioma: Conocer la cultura detrás del inglés puede hacerlo más interesante y menos intimidante. Participa en actividades culturales como eventos, festivales o talleres donde se use el inglés y aprenda sobre tradiciones, historia o aspectos curiosos de los países de habla inglesa.
La ansiedad es una reacción natural, pero no tiene que definir tu experiencia de aprendizaje. Recuerda que cada paso que das para mejorar tu inglés es una victoria.